24 de octubre de 2011

Lo que buscaba

Alguien que dinamite mi corazon en cada mirada...
Que me hiciera enmudecer el mundo cuando me susurre al oido...
Y que haga caerse todos mis cimientos en cada caricia...
Y de tanto esperar, llegó; llegaste a hacerme realidad mi sueño

Deseo

Deseo acariciarte, notar como vibra tu piel bajo mi mano, recorrer entero tu cuerpo y dibujar con mis dedos el mapa de ese país donde quiero quedarme...invadirte, conquistarte, poseerte y caer finalmente rendida a tu abrazo.
Deseo empezar un beso interminable que nazca en tus labios suaves y siga la ruta de mis dedos.
Deseo vivir llenándote de besos, encendiendo tu fuego, estallando de nuevo y empezar de nuevo.
Deseo percibirte antes, cubrir mi piel de tu aroma y consentir que mi esencia dibuje una senda para tus pasos.
Deseo dejar mi huella cerquita de ti. Que el aire me lleve cuando me añores.
Deseo que tu vengas hasta mí diluida en la brisa del mar, y seamos una siempre.
Deseo escuchar tus silencios y ser eco de tus pensamientos, adivina de tus anhelos, seguir la trayectoria de tus sueños, despojarme de recuerdos y desnuda, vestirme con tu piel, con tus caricias, con los susurros de tu voz.
Deseo arrancarte tus temores, desnudarte para hacerte un traje con mis besos, y refugiarnos en el calor de este espacio tuyo y mío, sin más nada que nosotras mismas.
Deseo mirarte mientras duermes, y desearte una y mil veces. Memorizar con mis ojos cada rincón de tu cuerpo para luego cerrarlos y encontrar con el mío todos sus secretos, enredarme a ti, rodearte, envolverte, resguardarte en mi regazo y volverme tú y dejarte ser yo, volar para ti y llevarte conmigo, respirar por ti, dejarte sin aliento, exhausta, satisfecha y sin embargo sedienta de más besos, más caricias, de volver a mi cuerpo y gustosa cederte terreno, dejarme conquistar sin resistencia y amanecer viendo el sol salir por las colinas de tu piel, y quedarme dormida en las llanuras de tu pecho.

no voy a...

Esto no es una declaración de amor, ni las palabras que se dicen cuando no se sabe que decir.
No es el resultado de noches de miel y caricias, ni días de sol abrazándonos.
Esto no son frases escritas sin pensar, ni la búsqueda de ningún destino, no es una esperanza disfrazada, ni la añoranza que me envuelve.
No es que quiera escucharlo de tu boca aunque me guste como lo pronuncias y la textura de tu voz.
No es una respuesta, ni la pregunta, ni el principio de un sueño.
Sólo es el resumen de lo que siento. De mi desierto en tus labios, la paz que he deseado, saber que después de horas de vuelo sólo quiero aterrizar en tu pecho.
Sé que hay mil canciones que dirían lo que ahora mismo no voy a decirte, porque ya sabes que dice mi mirada cuando se cruza con la tuya.
Sólo es para decirte que acamparé eternamente en tu alma, si me lo permites, que seré cómplice de tus sueños, el agua sobre tu piel, la palabra que no encuentras, el silencio en el que descanses cuando no quieras escuchar nada.
No voy a regalarte la luna ni a prometerte un palacio en las estrellas ni te llevaré al fin del mundo porque yo todavía no encontré el camino.
Sólo voy a regalarte los pedacitos que encontré de mi corazón, mi regazo para que te refugies por si llueve y un sendero todavía no andado, donde veo tus huellas junto a las mías.
No tengo frases hechas, ni poemas sin sentido, ni finales de película, ni falsas promesas. No voy a llenarte la casa de mil rosas o regalarte un diamante el día de los enamorados.
Sólo esperaré que tu vengas, llenaré tu piel de mis besos, susurraré en tu oído que te amo mientras duermes. Acunaré tus sueños, rociaré de caricias tu almohada para abrazarte aun cuando esté lejos. Te regalaré mis mejores momentos, llenaré tus rincones con sonrisas, te dejaré mi mirada para cuando quieras cerrar tus ojos.
No voy a decirte que estaré contigo toda la vida. Sólo voy a dejar que un día me mires, mirando el cielo junto a ti y descubras que sigo a tu lado, sin ganas de irme.
No voy a decirte que estaré contigo toda la vida. Pero serás tu la que acaricie mis canas, venga al médico conmigo y fabriqué recuerdos para hablar a la "hora del te"